En un presente donde medio mundo sabe todo acerca de las tendencias de temporada (qué son los pantalones 'Slouchy', qué botines son los que más arrasan entre las madrileñas, qué jerséis son los que más duran…), las marcas de ropa (sobre todo, las low cost) tienen que ingeniárselas doblemente para conseguir sorprender a sus sabiondas compradoras. Piezas híbridas, tendencias del pasado (y del futuro) o materiales inusitados son algunas de la estrategias utilizadas para alcanzar el factor sorpresa. Un buen ejemplo de ello es el nuevo zapato de Stradivarius, una mezcla de tres de las siluetas más alabadas del otoño – la bailarina estilo Mary Jane, la zapatilla deportiva y el mocasín – que aterriza en las tendencias para adueñarse de ellas.
© Cortesía de Stradivarius
Toparnos con ellas fue abrir un abanico de preguntas: ¿estábamos ante unas bailarinas con suela?, ¿eran unos mocasines rarunoes?, ¿o lo que teníamos en frente era en realidad un nuevo formato de zapatilla deportiva? Ninguna opción correcta y todas a la vez. La explicación a tan ingenioso diseño la encontramos en la pasada colección de Burberry – ubicada en la recién terminada temporada de primavera/verano 2019 -, donde fue avistado por primera vez un zapato de características similares.
Ahora es Stradivarisu quien recupera este zapato plano y de factura college y lo convierte en un todo en uno que atesoraba lo mejor de cada tipología de zapato y lo mejor de cada tendencia.
© Cortesía de Stradivarius
Un zapato tan raro (y a la vez tan paradójicamente apetecible) queda estupendamente bien con calcetines llamativos como los dos siguientes modelos de lana de la marca Hysteria by Happy Socks.
· El multicolor
© Cortesía de Hysteria
· El de estampado retro
© Cortesía de Hysteria
Minifaldas de cuadros escoceses, pantalones cortos de efecto piel, vestidos largos y de inspiración gótica… Las prendas con las que la nueva joya de Stradivarius puede combinarse son infinitas.
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