"Un ser humano maravilloso se ha ido de este mundo. Sophia Kokosalaki–una brillante y talentosa diseñadora que reinventó el drapeado griego y lo elevó a la alta moda. Las piezas que me diste son muy apreciadas ahora y siempre. Ojalá hubiera podido ver más de ti. Le mando todo mi amor a sus amigos y familiares", así se despedía de la diseñadora y daba el pésame a sus seres queridos la periodista de moda Melanie Rickey.
Al suyo, se han sumado numerosos mensajes de personalidades de la industria de la moda que han mostrado su respeto y cariño por la diseñadora griega establecida en Londres, fallecida la pasada noche a la edad de 47 años. La crítica de moda Sarah Mower le dedicaba un bonito artículo en Vogue Estados Unidos: "Sophia Kokosalaki estaba–como McQueen debió sentir–a la vanguardia de una generación londinense diferente. Ella fue la primera diseñadora en emerger de Central Saint Martins que fusionó una herencia europea (drapeados clásicos, artesanía helénica) con un sentido minimalista de cómo se podía usar en la calle o en un club". Al igual que Alexander McQueen–quien también la admiraba–, Kokosalaki se ganó el respeto de la industria; estudiantes, críticos y empresarios del mundo de la moda supieron apreciar el talento de la creadora.
A post shared by Melanie Rickey (@fashedatlarge) on
Nacida en la isla de Creta, de padre ingeniero civil y madre periodista, la diseñadora encontró en sus raíces su mayor fuente de inspiración y fue su abuela quien le enseñó macramé y ajiro. Sin embargo, se trasladó a Londres persiguiendo su sueño de hacerse un hueco en el mundo de la moda; para ello, decidió formarse en la prestigiosa escuela Central Saint Martins. “Yo estaba dispuesta a abandonar mi hogar, mi país, mi estilo de vida, mi todo, para entrar. Pensé que mi vida terminaría si no entraba. ¡O me admitían o me pegaba un tiro!", le confesó en una ocasión a Mower. Envío su primera solicitud a los 16 años pero, al ser demasiado joven, le recomendaron que volviera a presentarse al cumplir la mayoría de edad. Así consiguió graduarse en 1998 y, un año más tarde, presentó su primera colección en la Semana de la Moda de Londres.
"Me gusta diseñar ropa funcional que también te permita lucir interesante", afirmó sobre su estilo. En sus colecciones creaba un vestuario para diosas griegas cool del siglo XXI, femenina y glamurosa.
A post shared by Sophia Kokosalaki (@sophiakokosalaki) on
A post shared by Sophia Kokosalaki (@sophiakokosalaki) on
Pronto se convirtió en una apuesta segura para la alfombra roja; Alexa Chung, Anne Hathaway, Kate Hudson o Amber Heard fueron algunas de las celebrities que lucieron sus diseños y en 2004 tuvo la oportunidad de rendir el homenaje definitivo a su tierra al ser elegida para crear el vestuario de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Atenas.
Cuando su firma fue comprada por Only the brave de Diesel en 2007 se dedicó a diseñar las colecciones de Diesel Black Gold para desfiles en Nueva York de 2010 a 2012 antes de volver a comprar su propia etiqueta. Se centró en colaboraciones con marcas como Topshop y Asos, y trabajó en el relanzamiento de la firma francesa Vionnet hasta que decidió reinventarse ideando vestidos de novia y joyería. "Ver lo que hizo Sophia me dejó alucinado como estudiante", afirmó Kim Jones. "Esa increíble y elegante mujer guerrera que creó".
A post shared by Sophia Kokosalaki (@sophiakokosalaki) on
Fuente: Leer Artículo Completo