Se conocieron las pasadas navidades y desde entonces no han dudado en hacer pública su relación.Julia Fox y Kanye West son la nueva pareja de moda. Así lo demuestran en cada una de sus apariciones públicas, en las que se convierten en protagonistas de cualquier foco mediático, más allá de por su polémica historia, también por las lecciones de moda que ambos dejan a su paso.
Desde que fuera la propia actriz la encargada de hacer público este romance, su historia no ha dejado de ocupar titulares. Tanto es así que este fin de semana, durante Paris Fashion Week, ambos han sido dos de las personalidades más comentadas de esta gran celebración de moda.
Para acudir a esta cita en la ciudad francesa, Julia escogió diferentes, llamativos y atrevidos looks con los que asistió a los desfiles. El primero que llamó la atención fue una apuesta fetichista en la que lució un vestido de piel rojo ajustado al cuerpo con una abertura lateral en la pierna que combinó con unas botas altas negras y un trench estilo Matrix de piel, una de las tendencias preferidas celebrities como Hailey Bieber o Lila Moss.
Si este outfit dio una bienvenida por todo lo alto a la actriz por las calles de París, el siguiente que escogió no dejó tampoco a nadie indiferente. Asistió al desfile de Kenzo con un total look denim formado por un pantalón de tiro bajo ancho que vistió bajo unas botas del mismo tejido de media caña y que, remató con un crop top vaquero que recuerda al corsé más icónico de Madonna, el que vistió de Jean Paul Gaultier en los años noventa durante su gira en la gira Blond Ambition World Tour. Julia deslumbró así apostando por este top abotonado en el centro de la silueta y con dos conos puntiagudos que resaltaron su pecho.
Pero si hay un estilismo que ha sido especialmente comentado, este ha sido el escogido para formar parte del front row de Schiaparelli. La actriz asistió con un look negro de piel de pies a cabeza en el que conjugó unas botas altas hasta los muslos, con leggins y un vestido muy ceñido de manga larga con cremallera central que marcó su silueta, potenciando sus curvas y recordando, inevitablemente, a los looks más recientes de Kim Kardashian en los que apuesta por conjuntos monocolor de piel que también acentúan su figura.
No es la primera vez que ambas muestran sus coincidencias estilísticas. Analizar sus estilismos es encontrar grandes parecidos: desde su pasión por la piel o el vinilo como tejidos predilectos de su armario, pasando por las siluetas ceñidas al cuerpo, hasta su gusto por las asimetrías y las transparencias. Dos mujeres que, aunque con profesiones e inquietudes diferentes, guardan trazos de estilo similares.
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