¿De verdad Selena Gómez y Francia Raísa ya no son amigas, tras el transplante de riñón?

A comienzos de 2019 todavía hablábamos de Francia Raísa como la mejor amiga de Selena Gómez. Y no era para menos: fue quien le donó un riñón en 2017, cuando los suyos empezaron a fallar a causa del lupus. Le salvó la vida y, de hecho, la propia Francia lo pasó muy mal tras el transplante. A finales de ese año Selena todavía se refería a ella como 'su mejor amiga' y, a pesar de que hacía mucho que no se las veía juntas, pensábamos que simplemente era porque la actividad de ambas en las redes sociales se ha reducido mucho. Pero, tal y como revela Radar Online, esta separación va mucho más allá de Instagram y hablan de una amistad que lleva meses ROTA.

Hace exactamente 9 meses que Selena y Francia no se hablan. Y, concretamente, habría sido quien le donó el riñón la que habría iniciado este distanciamiento, al comprobar cómo su amiga había dejado de cuidarse y volvía a los malos hábitos -como el alcohol-, tan nocivos para alguien que había recibido un transplante así. Sí, con lo mucho que le costó recuperarse a Raísa de la intervención, es normal que se mostrara molesta al verla cuidar tan poco el órgano que le donó desinteresadamente.

Pero Radar Online también tendría ahora la versión de Selena Gómez sobre esta enemistad, y también son como para llevarse las manos a la cabeza: "Lo cierto es que Selena ya estaba harta de sentir que le debía algo porque ella le donó un riñón", habrían declarado fuentes cercanas a la estrella. Bueno, ese 'algo' no es otra cosa que la vida, pero si ella lo ve de esa manera…

"Fue una decisión de Francia, Selena no le robó el riñón", concluye. Sí sí, nadie obligó a la actriz a someterse a esta intervención pero sí sería normal que su amiga le estuviera agradecida de por vida tras haber hecho algo así con ella. Y se sobreentiende que debería cuidar ese órgano en condiciones dado que la intervención fue muy complicada para ambas.

Sin embargo, la amistad ya está rota y Selena acaba de celebrar su 27º cumpleaños con sus otros amigos y, por supuesto, sin Francia. Una edad que, por cierto, no hubiera llegado a cumplir sin el riñón que su ex amiga le había donado…

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